Ecuador busca socio para detener la quema de gas, mientras aumenta la ira en la Amazonia

La petrolera ecuatoriana Petroecuador dice que está trabajando en apagar los mecheros de gas que se queman en la Amazonia para cumplir con el plazo impuesto por una corte local, pero el progreso es demasiado lento para las comunidades cercanas que alegan que la quema causa enfermedades.

Un tribunal en la provincia de Sucumbíos ordenó el año pasado a Petroecuador y a un puñado de operadores privados detener cientos de mecheros, que queman el gas emitido durante la producción de crudo, en áreas habitadas hasta marzo de 2023.

La acción liberó el año pasado unos 400 millones de toneladas de gases de efecto invernadero en todo el mundo, según el Banco Mundial, y los investigadores han advertido sobre problemas de salud asociadas con la práctica.

Petroecuador espera encontrar un socio privado que invierta en la tecnología necesaria para capturar los 65 millones de pies cúbicos de gas que se emiten diariamente a través de los mecheros, que arden constantemente sobre las verdes copas de los árboles y modestas viviendas en la región amazónica.

La petrolera estatal dijo que 15 empresas han expresado interés, incluidas Promigas SA y Gran Tierra Energy.

"Parte del proceso de la captación es tratar de eliminar gradual y progresivamente estos mecheros dentro del plazo de la resolución judicial", dijo el director de proyectos de Petroecuador, Jaime Garzón, a Reuters.

El objetivo es comenzar a detener los mecheros en áreas habitadas a partir de septiembre, agregó Garzón, y apagar los de las zonas las rurales dentro de dos o tres años, mucho antes del tiempo de ocho años impuesto por la corte.

Se puede montar infraestructura para capturar el gas rápidamente con la empresa adecuada, dijo el exministro de Energía Fernando Santos.

"Es más una cuestión de técnica que de inversión y si una compañía con experiencia gana la licitación no va a tener ningún problema", añadió.

Petroecuador ya procesa unos 35 millones de pies cúbicos de gas para uso doméstico o electricidad en sus operaciones, pero espera eventualmente procesar todo el gas emitido por sus 391 antorchas, ahorrando u$s400 millones al año.

El Ministerio de Energía se disculpó en abril con las comunidades por el retraso en la extinción de las quemas.

Los operadores privados tienen unas 66 antorchas, pero la mayor parte de ese gas ya se captura para generar electricidad, según el Ministerio de Energía.

Para los residentes de las provincias amazónicas de Sucumbíos y Orellana, el cambio se está produciendo con lentitud.

"Esto nos va a matar más pronto", dijo Fanny Tufiño, de 71 años, cuyos cultivos están a unos 150 metros de un mechero. "Afecta mucho a nuestra salud, a mí me afectó la vista".

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ambito