La transformación de Planeta Azul ha sido notable en estos últimos años, desde acciones dirigidas a la conservación ambiental hasta la ampliación de su cartera de productos que la ha convertido en un diversificado fabricante de bebidas. Esta evolución tiene todavía más valor debido a que ha generado un impacto positivo y significativo en la calidad de vida de decenas de comunidades del país. 

Por ejemplo, la compañía ha logrado reducir en un 11% el uso total de plástico, optimizando además la cadena de transporte y disminuyendo en un 89.5% el uso de combustible, lo que equivale a 121,000 galones de gasoil anuales. Este logro forma parte de uno de dos proyectos innovadores que han marcado un hito en la industria y con el que la empresa ha logrado ser galardonada con el premio “Prácticas Prometedoras” otorgado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) en la categoría de "Modelos de Negocios Sostenibles". 

El segundo proyecto destacado es la introducción en el mercado local de la primera botella de agua fabricada con material 100% reciclado (RPET). Esta iniciativa se ha convertido en un modelo a seguir en soluciones de empaques sostenibles, ofreciendo una alternativa ambientalmente responsable frente a las botellas de plástico convencionales.

Es importante destacar que este reconocimiento por parte del PNUD y del CONEP resalta el compromiso de Planeta Azul con la innovación y la sostenibilidad, así como su liderazgo en la creación de empaques más ecológicos.

Por otro lado, la empresa ha logrado impactar en la promoción de la siembra de árboles de cacao en territorio nacional, a través de su Voluntariado Planeta, en alianza con el Fondo de Agua de Santo Domingo.

Al mismo tiempo, los acuerdos entre la compañía y la organización Litro de Luz han tenido un impacto transformador en las comunidades del norte del país. Gracias a esta colaboración, cientos de familias que antes carecían de acceso confiable a la electricidad y al agua potable ahora pueden disfrutar de estos servicios básicos de manera sostenible y asequible. 

Se trata de un proyecto con resultados sumamente valiosos, es una de las iniciativas que la empresa ha propiciado con mayor impacto a futuro para los ecosistemas del país, porque puede ser replicado tanto por la propia empresa, como por otras organizaciones que deseen aportar tangiblemente en el bienestar de las comunidades y en la sostenibilidad del país.

 

Además de los esfuerzos en sostenibilidad y desarrollo comunitario, Planeta Azul ha dado pasos significativos en la conservación de la biodiversidad local, particularmente en lo que respecta a la protección de los manatíes en la República Dominicana. En colaboración con la Fundación Dominicana de Estudios Marinos (Fundemar), la productora de bebidas ha firmado un convenio para proteger y recuperar la población de manatíes en el país.

Gracias al primer censo de manatíes realizado por Fundemar, con el apoyo de Planeta Azul, ahora se sabe exactamente que en el país hay una población aproximada de 110 manatíes. Convirtiéndose este en un dato relevante que ofrece una orientación sobre el camino a seguir para la conservación de esta especie y de su entorno natural. 

En los años recientes, Planeta Azul ha consolidado un enfoque centrado en la innovación y la sostenibilidad como pilares fundamentales de su crecimiento y desarrollo. A través de la implementación de mejores prácticas empresariales responsables, la empresa ha fortalecido su competitividad mientras sigue siendo una fuente de crecimiento económico para el país. 

Un ejemplo de esta realidad es su nueva línea de producción, con la que lanzó al mercado dominicano la primera botella hecha con material 100% reciclado. Además de ser una botella totalmente transparente, Planeta Azul logró una reducción de utilización del plástico por unidad, al pasar de 11.5 gramos a 10 gramos, facilitando así su reciclaje. 

La utilización de tecnología RPET para fabricar estas botellas ha mejorado su sostenibilidad y las ha hecho más amigables con el medio ambiente. En la actualidad, por cada 100 botellas recicladas se pueden producir 94 nuevas botellas 100% RPET. Todas estas innovaciones convierten a Planeta Azul en un referente de la sostenibilidad en el país. 

Y es que, a nivel interno, la empresa ha realizado cambios importantes con metas de sostenibilidad y responsabilidad ambiental, tanto en su modelo de negocios como en sus operaciones. Estos cambios incluyen la implementación de nuevas tecnologías y procesos de producción más eficientes y sostenibles, así como la adopción de prácticas de gestión ambiental que reducen el desperdicio y promueven el uso responsable de los recursos. Además de que ha llevado a cabo programas de capacitación y sensibilización para el personal, con el fin de fomentar una cultura organizacional centrada en la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. 

Los aportes de Planeta Azul por la sostenibilidad nacional no han pasado desapercibidos. En el mes de marzo, la empresa recibió el Premio Nacional a la Producción Más Limpia en la categoría de Materiales, otorgado por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por su proyecto de Reducción de “Procesamiento de Plásticos y Desperdicios Derivados”. 

Mientras que, en su nueva visión, la productora de bebidas expresa su compromiso con la transparencia, la calidad y la contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la impulsa a seguir innovando y buscando soluciones que generen un impacto positivo en el medio ambiente y en la sociedad en general.

Planeta Azul también forma parte de la iniciativa local NUVI, conformada por empresas dominicanas para fomentar el reciclaje en el país. Lleva con orgullo además el sello “Hecho en RD”, otorgado por el Ministerio de Industria, Comercio y Mipyme, con el que la empresa reafirma su compromiso con la calidad, la transparencia y sostenibilidad.