Generando valor a través de la inversión salarial
“Precio es lo que pagas… Valor es lo que recibes”, leí hace algunos años. Como empresario y gerente, para generar los atributos y cualidades que nos distingan como organización y nos hagan sustentables, más allá de observar las buenas prácticas administrativas y operativas del negocio, me pregunto ¿qué estoy dispuesto a invertir, en términos humanos, para alcanzar el valor deseado?
Como una opción a la indagación anterior, además de las ya declaradas en los fundamentos filosóficos de tu empresa, partiendo de la premisa “hallar primero al Ser Humano para luego encontrar, potenciar y liberar el alma de las empresas”, te invito a considerar dos acciones que considero medulares en el proceso.
- Invierte en los tres salarios fundamentales:
¡Sí!, en plural. El alcance progresivo del digno propósito empresarial se fortalece y habilita al compartir salarios igualmente dignos con nuestros colaboradores, siendo el más importante de ellos el espiritual. Más allá de nuestras interpretaciones, ¿qué creencias, valores, intereses e intenciones estoy modelando, ofreciendo y cultivando en mi organización? El contenido que habite en éste primer “concepto salarial” es el generador del segundo: el emocional. ¿Cuál es “la firma emocional”, en sus aspectos emoción, sentimientos y estado de ánimo que experimentan los habitantes de nuestro sistema humano? El contenido vital de ésta “firma” es el gran referente y determinante, a su vez, de la generación de las conductas individuales y socio - laborales que nos permiten alcanzar, o no, los indicadores deseados. El tercer salario a pagar, en dinero, es un estímulo muy importante al ser humano; sin embargo, son el espiritual – emocional los determinantes para la generación de valor y el alcance de las metas. ¡Invierte allí!
- Balancea la relación deber – privilegio:
Procura diligentemente que “la masa crítica” que mueve a tu sistema humano debilitándolo o potenciándolo, restringiéndolo o liberándolo, trascienda del cumplimiento del deber laboral a la vivencia del privilegio de servir con colaboración inteligente, íntegra, integral e integradora, a fin de alcanzar logros satisfactorios como personas y como entidad laboral. Este balance es resultante de la gestión en los salarios espiritual y emocional, y es fundamental para llegar a ser sustentables y ecológicos en nuestros más altos sueños y objetivos. Primar al ser humano por sobre los procesos, con una gestión basada en valores compartidos y un lenguaje generativo, agilizando y alineando la experiencia laboral al bien común y al mejor costo posible para todos, es la clave. Entonces, el valor comienza a revelarse y aparecen nuevos “territorios posibles”. Operar desde el deber o desde el privilegio de vivir: “¡he allí la cuestión!”. Cuida este balance porque es medular para la generación de valor y hace una diferencia en la obtención de los resultados empresariales.
¿Cuál es el valor entregable de estas acciones?
Además de mayor libertad y solidaridad en el ámbito espiritual de la organización:
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- Disfrutarás de un mayor sentido en la gestión, transversal a todos sus procesos, alejándote del estrés de hacer más rápido, al menor costo posible y a mayor riesgo del otro; para venir al aprovechamiento consciente y mesurado de las posibilidades existentes en el sistema humano, partiendo del individuo como ser valioso, fuente de riqueza y valor.
- Participarás en la creación de una mayor diferenciación como clave para la sustentabilidad de tu sueño empresarial. Esta será hija del sentido de valía de los individuos que te acompañan y de los equipos que conforman. Entonces la distinción, la fortaleza y la expansión te serán posibles.
- Medirás mayores índices de inteligencia aplicada en tu organización, lo cual, a su vez, impulsará la escala en sus índices de colaboración inteligente y, como resultado, de sus logros satisfactorios. El rendimiento de los individuos y de los equipos crecerá, siendo más eficientes y no solo eficaces o efectivos. La productividad se incrementará exponencialmente.
El precio que decidimos pagar es el reflejo de nuestro ser, hace una diferencia en nuestro servicio a la humanidad y contribuye a la construcción del legado de nuestras vidas. ¿Qué te impide generar valor a través de la triple inversión salarial sugerida?... ¡Inspírate hacia la grandeza!