IV Edición: Recursos energéticos & mineros

La inversión extranjera crece e impulsa nuestra economía, liderando la región

República Dominicana, destino privilegiado por su localización geográfica estratégica, por sus recursos naturales y por sus condiciones políticas, abiertas a recibir inversión para nuestra economía en constante desarrollo. Nuestro país, debe en una buena proporción su florecimiento turístico e inmobiliario de las últimas décadas a la voluntad de inversionistas extranjeros, quienes con la aprobación del gobierno y sus diferentes instituciones regulatorias y en sociedad con empresas locales, han aportado cuantiosos recursos para crear muchas de las estructuras que hoy son pilar de empleos, de captación de nuevas inversiones, y de la transformación positiva que hoy exhibimos.

La inversión extranjera nos impacta de manera vital, nos abre a contacto con otras experiencias que nos permiten crecer en el campo tecnológico, intelectual, industrial, intercambiando las mejores prácticas y metodologías de trabajo, fomentando la inclusión de la población a nuevos puestos laborales, elevando nuestros estándares con la sana competencia en los diferentes renglones productivos, expandiendo las dinámicas económicas y a su vez aportando mayores recaudaciones fiscales.

El avance institucional, los procesos cada vez más amigables, más transparentes, mejor definidos y eficientes, permiten que rápidamente puedan establecerse empresas, dentro del marco de la ley, iniciando operaciones con estabilidad y de manera orgánica.

Este es un mercado competitivo, que, para los bienes de consumo, al igual permite el rápido acceso a la región, de manera local contamos con canales de distribución bastante organizados.

Otras áreas económicas que han sido receptoras de inversiones internacionales son la banca, la energía y minería, las telecomunicaciones y la industria manufacturera.

Otros factores adicionales que permiten la atracción de capitales son los reducidos costos de la mano de obra en comparación con otros países, la fuerza de trabajo obrera y la formada profesionalmente con alto índice de manejo del idioma inglés, la disponibilidad de recursos naturales, y el control del mercado cambiario.

Para que este efecto continúe su constancia y fuerza en nuestro país, debemos velar por mantener y mejorar los factores antes mencionados, además del escenario político y social que permita la confianza de la población y evite una crisis ciudadana, erradicar la corrupción y no dañar la imagen e institucionalidad que lacere cualquier acercamiento empresarial entre locales y extranjeros.

En el 2017, según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), nuestro país recibió 2.407 millones de dólares de capital extranjero de manera directa, significando esta cifra un aumento de 9% en relación con el periodo anterior.

Nuestro país es líder en el Caribe como destino de flujos de capital para la inversión, y se pronostica un aumento sostenido hasta el 2020.

De acuerdo con estadísticas del Centro de Exportación e Inversión de República Dominicana (CEI-RD); durante el periodo comprendido entre 2010 y 2017, la inversión se ha dividido como sigue: 23.9% para la industria manufacturera y el comercio, 18% para el sector minería, 15% al turismo, 13.6% desarrollo inmobiliario, 8.6% sector energético, 7% zonas francas, 7% telecomunicaciones, 6.7% sector financiero y un mínimo porcentaje al renglón transporte.

Una de las recientes iniciativas gubernamentales es la creación de ProDominicana, mediante el decreto 275 - 17, del actual presidente Sr. Danilo Medina, como parte esencial de los objetivos de la Estrategia Nacional de Desarrollo al año 2030 que tiene como uno de sus pilares, propiciar mayores niveles de inversión en nuestro país. Este mecanismo regulado por el CEI-RD debe ejecutar planes de acción para captar y retener inversionistas, además de focalizarlos en los renglones prioritarios, creando interacción multisectorial de encadenamiento productivo.

ProDominicana se convierte en la marca país y en el marco conceptual para continuar la promoción interna y externa de todas las leyes, instituciones, plataformas y foros que permitan el impulso económico a través de la inversión.

La inversión extranjera crece e impulsa nuestra economía, liderando la región