Al hacer referencia a uno de los motores de la economía nacional, el turismo encabeza una de las mayores fuentes de empleos directos e indirectos del país. De acuerdo a las cifras ofrecidas en el pasado discurso presidencial de rendición de cuentas, el 54% de los puestos de trabajo que se generan en el sector están ocupados por mujeres. Siendo precisamente una mujer la responsable de la promoción turística nacional de la República Dominicana, conversamos con ella sobre liderazgo femenino en esta edición especial.

Milka Hernández, es directora de Promoción Turística Nacional del Ministerio de Turismo de la República Dominicana, y desde esta posición, entiende que la equidad de género en los espacios laborales está concebida para ofrecer igualdad de oportunidades sin distinción de género. Es de opinión de que el liderazgo femenino responde a un estilo de vida organizacional participativo que integra a la mujer en las decisiones estratégicas de la empresa y se nutre de su percepción, deseo de superación y sensibilidad, impactando positivamente en el objetivo común que les une.

Está convencida de que la mujer dominicana es un claro ejemplo de superación y empoderamiento, pues el creciente interés en formarse en áreas como la tecnología, garantiza que este sector contará con grandes líderes femeninas, así como está sucediendo en otros ámbitos profesionales dirigidos tradicionalmente por los hombres.

Al referirse a la brecha digital, opina que esta se va cerrando cada vez más gracias al mayor acceso a nuevas tecnologías desde las escuelas hacia las comunidades, a través de iniciativas como República Digital. Al hablar sobre la igualdad en oportunidades, indica que en el país actualmente se muestra mayor interés por la participación femenina en diversas áreas del sector productivo nacional.

Aun así, es de opinión de que las mujeres necesitan mayor apoyo, además de confianza, pues precisan de más facilidades de preparación que les permitan mejorar sus competencias a través de programas formativos continuos.

Al hablarnos sobre liderazgo y empoderamiento femenino, está consciente del esfuerzo que requiere, y que en muchos casos implica tomar la decisión de abandonar planes personales o postergarlos para alcanzar las metas inmediatas que demanda la profesión. No es una alfombra de pétalos de rosas. subraya. como las barreras socioculturales, las creencias religiosas y una preparación académica insuficiente.

“En la medida en que las mujeres estén más preparadas y empoderadas, se derriban las barreras para asumir posiciones 54% de los puestos de poder.”

Está convencida de que la confianza es vital a la hora de integrar a las mujeres en puestos de mando Trabajo en una organización en donde su líder, además de creer en la mujer y su capacidad gestora,motiva a la superación y a la formación continua para el bien de la organización y de nosotras como piezas claves en el desarrollo de la sociedad.

Considera que el sexo no establece el desempeño en el trabajo, en cambio las competencias sí lo condicionan, pues son las que ayudarán al empleado a lograr las metas que le son conferidas.Su definición de éxito está cimentada en la felicidad, la que a su vez define como un estado personal vinculado a las expectativas y motivaciones de cada ser humano. En cambio, piensa en la excelencia como una necesidad de quienes dan el extra en las actividades ordinarias que realizan, con el interés de dejar una impronta de alta calidad en cada resultado.

Cuenta que su experiencia de vida laboral ha sido gratificante, pues durante 22 años de su vida productiva ha estado ligada a una institución participativa que se preocupa por desarrollar las competencias de sus colaboradores y en donde ha podido ampliar una carrera profesional que aún se perfila en crecimiento. Por otro lado, considera a los errores como oportunidades que aportan enseñanzas muy necesarias para la mejora personal y profesional.

Ratifica al liderazgo femenino como una gran contribución que favorece la inclusión, una mayor orientación hacia las personas, Por más solidaridad, sensibilidad y productividad en las instituciones.