Apuntaron que la falta de trabajadores en el mercado laboral no solo se debe al coronavirus, sino también a tendencias demográficas de largo recorrido y la menor participación de adultos en dicho mercado.
El informe llama la atención sobre el hecho de que sin una mayor inmigración y sin mayores esfuerzos que animen a más adultos a participar en el mercado laboral la mano de obra es probable que siga "constreñida en el futuro".
Por ello sugirieron "políticas proactivas" como un mayor gasto en los cuidados infantiles, un aumento de la migración y un mayor poder de negociación de los trabajadores para incrementar la mano de obra.
De lo contrario, advirtieron del "impacto negativo" en los estándares de vida de un menor crecimiento económico motivado por la menor participación de adultos en el mercado laboral y una población envejecida.
Durante la pandemia, se dio un fenómeno conocido como "la gran dimisión" en la que muchos trabajadores en el país renunciaron voluntariamente a sus puestos de trabajo.
En febrero, la tasa de desempleo en Estados Unidos creció 2 décimas y se situó en el 3.6 %, después de tres meses consecutivos en los que había bajado, en un momento en que los ojos están puestos en los efectos que puedan tener sobre el mercado laboral las subidas de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal para contener la inflación.