El ascenso de los neobancos: Retos y oportunidades para la banca tradicional

Centroamérica y Caribe.- Por Nicolás Perdomo, vicepresidente de ventas de Backbase para América Latina.- En los últimos años, los neobancos han irrumpido con fuerza en el sector financiero, especialmente en América Latina, donde su adopción crece de manera acelerada. Según Statista, para 2028 se espera que más de 386 millones de personas utilicen estas plataformas en todo el mundo. Este fenómeno está impulsado por su enfoque tecnológico, la capacidad de escalar operaciones y su atractivo para segmentos desatendidos, como jóvenes, poblaciones de bajos ingresos y pequeñas empresas.

En América Latina, la adopción de neobancos ha sido impresionante. En 2018, sólo 9 millones de personas utilizaban estos servicios. Para 2019, la cifra creció un 307.8%, alcanzando 36.7 millones, y continuó en ascenso hasta llegar a 77 millones en 2021. Se espera que para finales de 2024 esta cifra alcance los 150 millones de usuarios, con Brasil, Chile, Argentina y Colombia como los principales mercados.

Ventajas tecnológicas y desafíos de adopción

Los neobancos destacan por sus plataformas digitales modernas, basadas en la nube, que les permiten adaptarse rápidamente y ofrecer servicios innovadores. En contraste, los bancos tradicionales, aunque han aumentado su inversión en tecnología, suelen enfrentar limitaciones derivadas de sus infraestructuras heredadas, lo que ralentiza la implementación de nuevas funcionalidades.

Además, los neobancos ofrecen una experiencia completamente digital, accesible desde aplicaciones móviles diseñadas para ser intuitivas y disponibles desde cualquier lugar, atrayendo especialmente a las generaciones más jóvenes, como la Gen Z. Sin embargo, la falta de alfabetización digital y financiera sigue siendo un obstáculo para su adopción masiva. Según el estudio Finanzas Digitales: La experiencia del consumidor 2024, el 62% de las asociaciones de consumidores señalan esta barrera como un desafío clave.

La oportunidad para la banca tradicional

En este contexto, los bancos tradicionales tienen la oportunidad de aprovechar su reconocimiento de marca y la confianza construida a lo largo de décadas. Según la cuarta edición de la encuesta de PWC Argentina, el 49% de los encuestados valora la atención personalizada de un banco tradicional, lo que representa una ventaja competitiva.

Para mantenerse relevantes, las entidades tradicionales deben adoptar una transformación digital integral que complemente su fortaleza en interacciones presenciales con servicios digitales personalizados. Esta estrategia híbrida permite a los bancos tradicionales atender tanto a clientes que buscan soluciones rápidas como a aquellos que valoran el acompañamiento humano en situaciones más complejas.

“La innovación no debe ser un fin en sí misma, sino una herramienta para acercarnos más a las necesidades de las personas”, destaca Nicolás Perdomo. “La digitalización bien aplicada puede optimizar la experiencia del cliente, tanto presencial como virtual, generando confianza y fidelidad en el proceso”.

Un futuro financiero inclusivo y conectado

La banca en América Latina está en un punto de inflexión. Los neobancos han demostrado que la innovación tecnológica y la inclusión financiera pueden ir de la mano. No obstante, los bancos tradicionales tienen la posibilidad de reinventarse, adoptando tecnologías modernas y ofreciendo soluciones híbridas que combinen lo mejor del mundo digital y presencial.

Este enfoque no sólo permitirá atender a nuevos segmentos, sino también fortalecer relaciones de confianza con los clientes existentes, posicionándose como líderes en una industria en constante evolución.